Intervención del Centro Tierra de Todos en el Congreso Internacional de la lengua Española en Cádiz
La Fundación Tierra de Todos, perteneciente a la Delegación de episcopal de Migraciones de Cádiz y Ceuta ha recogido una serie de relatos fruto de más de 12 años de trabajo con personas migrantes en el aprendizaje de la lengua española.
Os dejamos el vídeo de la intervención:

Intervención completa de Jerónimo Vicente
De todos es sabido que el IX Congreso Internacional de la Lengua Española, que se está celebrando en Cádiz es un acontecimiento muy importante y una oportunidad merecida para reivindicar el protagonismo de esta ciudad en la expansión de la lengua española por muchos motivos, que a lo largo del congreso se han ido explicando.
El tema central que abarca el Congreso Internacional de la Lengua Española, como también sabéis es el mestizaje e interculturalidad, y es aquí, en la interculturalidad, donde la Fundación Centro TIERRA DE TODOS quiere aportar a este Congreso, y a la ciudad su granito de arena, poniendo en valor a las personas que vienen de otros países y aprenden el español gracias a otras personas que les enseñan, como proceso necesario para poder alcanzar una inclusión social y laboral.
Queremos dar voz a los migrantes, últimos en nuestra sociedad en muchos sentidos, pero a la vez primeros en valorar la lengua española como herramienta eficaz para su empoderamiento real.
Y sucede que, en éste cruce de caminos que supone la inmigración, se produce un mestizaje cultural que enriquece con mil matices la lengua española, ese idioma que acaso sea la más preciada herramienta que le fue dada al ser humano.
En el libro “El Síndrome de Ulises”, su autor el Doctor Joseba Achotegui, -psiquiatra y profesor de la Universidad de Barcelona desarrolla la teoría de que hay siete lutos o traumas en las personas migrantes que afectan a todas las áreas de la vida. Son: La familia y los seres queridos, la lengua, la cultura, la tierra, el estatus social, el contacto con el grupo y los riesgos para la integridad física. Pone en segundo lugar por importancia la falta de conocimiento de la lengua del país de destino como elemento que paraliza, estresa y hace vulnerable al que no la conoce.
La Delegación Episcopal de Migraciones de Cádiz y Ceuta, a través de la Fundación Centro Tierra de Todos y la Asociación Cardijn, lleva más de 15 años enseñando español a los migrantes que llegan a nuestra provincia, y por
consiguiente, sanando parcialmente cicatrices y minimizando los traumas que todo migrante trae consigo por el simple hecho de serlo.
Aseveramos que el aprendizaje de la lengua es una acción contrastada para la humanización de la sociedad.
El Congreso Internacional de la Lengua Española es un espacio ideal para elevar al colectivo migrante, por cuanto de bueno aporta a nuestra sociedad y también para confirmar que la lengua española se erige como un elemento aglutinante de personas y culturas.
A lo largo de los años hemos tenido muchas experiencias de superación y anécdotas muy entrañables en torno a la enseñanza del español para migrantes, y hemos pensamos que podría ser una buena idea editar un pequeño librito -dentro del marco de la celebración del Congreso-, donde se recogieran las más sobresalientes, y quede para la posteridad en el recuerdo del congreso.
La publicación de estos relatos ilustra lo intercultural, que forma parte del lema del IX congreso Internacional de la Lengua Española.
Les aseguro que la lectura de estas historias, les hará ver la importancia del aprendizaje de la Lengua Española en los procesos de integración social de las personas migrantes.
Presentamos ahora este librito con páginas llenas de vivencias reales, conmovedoras, que servirán para acercar la realidad del fenómeno migratorio a la ciudadanía, perdurará en el tiempo, y valdrá para recordar el Congreso Internacional de la Lengua española que se celebró en Cádiz en Marzo de 2023.
Una de esas historias que aparecen en el libro la va a leer ahora Mohamed el Harrak, un chico marroquí que ostenta el record, por decirlo de alguna manera, de ser el menor no acompañando que llegó solo a las nuestras costas en patera con menos edad: 7 años.
Es por ello que su acento no dista mucho de un gaditano. Después de mucho acompañamiento y de muchos esfuerzos por su parte, entre ellos el de aprender español, está en el último curso de grado universitario de trabajo social. Él quiere ayudar para que otros chicos no pasen por lo que él pasó.